Mannaja : el valle de la muerte

Mannaja (1977)
Sergio Martino

Niebla, un hombre corre por el fango intentando escapar, cae, se levanta y corre de nuevo, saca su pistola para defenderse pero su perseguidor le lanza un tomahawk y le revienta parte del brazo , entonces escuchamos sus gritos de dolor.

Comienzan los títulos de crédito y Mannaja arrastra a su presa con un lazo al cuello y parte del brazo cercenado: una voz grave canta; you , alone , a solitary man ... . La fuerza de las imágenes de Sergio Martino perforan tus párpados como los clavos con los que más tarde los villanos intentaran dejar ciego al protagonista .




Mannaja : el valle de la muerte , es el principal exponente de eurowestern tardío , rodado un año después de la interesantísima Keoma (ídem,1976) , es el último spaghetti western real del que tengo noticias, en una época donde el género estaba muriendo incluso en su vertiente humorística e intentos como el anteriormente mencionado film de Enzo G Casteralli no hacían mas que confirmar el fin de la moda que inauguró Sergio Leone y que nos dejó algunos clásicos de culto como Django (ídem,1966), El halcón y la presa (La resa dei conti,1967) , Corre cuchillo corre (Corri, uomo, corri,1969) , El gran silencio (Il grande silenzio,1968) ... solo por citar algunas de mis favoritas , y confirmó que existía talento entre los cineastas europeos para crear buen cine de genero con expectativas comerciales , sin más coartada cultural que su oficio , reflexiones políticas entre líneas y medios reducidos . En el caso de Mannaja , Sergio Martino declaró en una ocasión que la estética sucia y la niebla que aparece durante todo el metraje se debe a la necesidad de disimular el mal estado en el que se encontraban los estudios romanos donde rodó la película .



En Mannaja nos encontramos aparentemente con la típica historia de venganzas del western italiano, un pistolero (Maurizio Merli) llega a un pueblo donde se encuentra con el cacique local que está postrado en silla de ruedas protegido por su ladino secuaz Valler (John Steiner). Mannaja tiene una cuenta pendiente con el rico terrateniente mientras que Valler intenta eliminarle, pero a pesar de ello accede a llevar el rescate que piden unos forajidos por su hija secuestrada, a partir de ahí las traiciones se sucederán en círculos.

Siguiendo la pauta marcada por Leone las conexiones con el cine de samuráis son evidentes. A Mannaja, le clavan los párpados y le entierran en la arena mirando al sol hasta que lo dejan ciego, pero sobrevive a la tortura y retorna como un letal asesino que lanza tomahawks a propulsión como si de una película de Zatoichi se tratase.



Esta es una cinta llena de buenos momentos que se sostiene por la inventiva de sus imágenes y una excelente historia , pienso por ejemplo en cuando al protagonista lo vende su compañero y suena el tema "Like a snake" , o mientras construye sus Tomahawks con piedras de la cueva donde se resguarda para después usarlos para matar en la oscuridad a los asesinos que van a buscarle a su escondite . La banda sonora, bizarra y fascinante, hace funcionar las imágenes como el aceite los piñones de la maquinaria de un perverso motor; Burt Craven con su garfio, la relación de Valler y la hija de su viejo jefe, la puta pelirroja que se enamora del protagonista, o la llegada final del antihéroe a la ciudad para encontrarse con Valler y sus perros son momentos todos ellos excelentes que componen un conjunto sobresaliente. 

Con esta película murió el euro western sí, pero fue una muerte dulce, y no como otros intentos de revivir el género , que más bien invitaban a la eutanasia.